Aunque parezca elaborada es una receta bastante sencilla. Haceros con un hermoso calabacín Hay que vaciarlo teniendo cuidado de no romper la piel y guardar la pulpa. Hay un truco que consiste en escaldar el calabacín con anterioridad, pero yo no hice y no hace falta. Lo partís en dos mitades y a vaciarlo. Con la pulpa del calabacín, un diente de ajo y una cebolleta y un tomate hacéis un sofrito a fuego medio. Si se os queda un poco seco le añadís un poco de vino blanco o caldo, eso a vuestro gusto. Retiráis el sofrito en un plato y salteáis la carne picada. Una vez hecho esto lo juntáis todo y rellenáis los medios calabacines. Espolvoreáis con queso rallado y lo horneáis unos 20 minutos. Ir mirando el queso para que no se queme.
Y voilà. Un estupendo plato, lleno de sabores y deliciosp.
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